Eso depende de la época del año que usted vaya. Es muy común creer que las mariposas se pueden ver mejor solo en febrero o marzo. Ese es un gran error. En realidad, muchos días de noviembre, diciembre y enero son excelentes: soleados y con mañanas brillantes. Debido a esa creencia errónea la mayoría de los mexicanos visitan los santuarios precisamente en febrero y marzo (más del 90% de los visitantes son mexicanos). Además, los maestros organizan sus excursiones escolares precisamente por esos meses. También hay razones económicas para ello: las festividades de fin de año y Año Nuevo significan gastos fuertes de los que las familias se recuperan hasta febrero. ¡Ese es el tiempo en que escuelas y agencias de viajes ofrecen viajes, porque hay quien los compre! Y es cuando se desata la “fiebre” de las monarcas.
Ello quiere decir que es muy probable que el visitante extranjero encuentre aun entre semana excursiones de mexicanos tanto privadas como escolares desde inicios de febrero. Sí ayuda hacer su viaje con expertos que puedan evitar las multitudes hasta donde sea posible, pero no debe esperar que le vendan un santuario para usted solo.
Actualmente no existe ninguna garantía de que no encontrará usted otra gente en los santuarios, pero le recomendamos una regla a seguir: si usted anda cerca de Michoacán, en época de fines de otoño hasta principios de abril, aproveche y visítelas, de todas maneras su espíritu saldrá ganando, aún en las peores condiciones.
¿Conviene ir mejor en fin de semana? ¿Hay más gente esos días? ¿Qué tal entre semana?
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